Esta mañana he despertado con la noticia de que Clarence Clemons había muerto al no superar su doble intervención por derrame cerebral al que parecía sobreponerse, pero se ha complicado desde el miércoles.
Ayer 18 de junio, Big Man Clarence Clemons murió en un hospital de Florida donde residía. Clarence estaba rodeado de su familia, sus amigos y todos los mensajes que hemos ido mandando estos días a través de twitter, facebook, e-mail, carta…
El hombre del saxo. El que me hizo aprender a sentir el R’nR’. El amante y juguetón del Soul. El de la voz profunda. El de la sonrisa a todas horas. La piedra filosofal de The E Street Band, el punto de apoyo, el de inflexión. El de unión.
Con su banda: The Red Bank Rockers, con su otra banda: The E Street Band. Con las colaboraciones con decenas de artistas, sesiones de estudio. Sabías cuando sonaba su saxo, porque sonaba especial, único. Y seguirá sonando a todo volumen en casa, en el coche, en el iPod y donde se tercie.
Me estremezco al escuchar el solo de Jungleland. Me dio un vuelvo el corazón en el Bernabéu hace tres años al escuchar los primeros compases porque sabía lo que vendría, ese solo de saxo con mayúsculas, que hace que se pare el mundo, con su fuerza y pasión. Haciendo rugir la jungla…
Intro de Bruce Springsteen para presentar a Clarence Clemons
Con lágrimas es los ojos, hasta siempre Big Man!