Tengo recopilado de alguna u otra manera horas y horas de documentación para exponer, luego leer, ver y escuchar, porque hay texto, vídeos y programas de radio (como este de Luis Herrero con David Bravo y Pedro Pérez, presidente de la FAPAE), con el culebrón desatado por la llamada Ley Sinde, pero no tengo fuerzas.
A cada rato, nuevas noticias. Twitter plagado de mensajes. Facebook haciéndose eco con enlaces y mensajes. Los diarios recogiendo testimonios de partidarios y adversarios, haciendo recopilaciones de la historia en el tiempo de la aplicación o no de esta disposición, que no ley en sí misma.
Acojonante como se hunden en el charco artistas de todos los palos, contando el mismo cuento de ‘si vas a una tienda y robas algo, te reclaman el pago antes de irte’. Esto lo hacen con el caso del BMW (Teddy Bautista lo empezó) y el chorizo (Joan Manuel Serrat que guapo estabas cantando).
Álex de la Iglesia, director de cine, movilizó a unos y a otros para que entre todos se entendieran y consiguieran una ‘Ley SInde’ buena para todos. Es imposible desde sus cimientos. Álex anuncia que dimite, el que defendía a la Sinde…
El barco se hunde, hace aguas y eso que no ha salido del astillero. En el puerto (el Parlamento) le han negado el acceso por una vez. Quieren intentarlo por una segunda maquillando el texto, ahora si intervienen 2 jueces. Dos! Una comisión nueva, organizada y montada por el gobierno de turno decidirá que web se cierra, se lo pasarán a un juez para que firme, como si fuera un notario o poco más, y con eso creen que todo está bien.
No tengo fuerzas de seguir, casi ni de poner enlaces, pero… alguno…
Álex de la Iglesia y los internautas se reunirán para buscar alternativas a la ley Sinde
La reunión de Álex de la Iglesia con los internautas, satisfactoria
La Ley Sinde no es lo que parece, ahora es peor
Sinde no solo dimite, sino que ya quiere sustituir al presidente de la Academia del Cine por Iciar Bollaín (no te metas ahí ICIAAAAAR!)
La ley Sinde reformada supera el primer trámite en el Senado.
Eso si, no os perdáis las noticias que van discurriendo. Todo es cuanto menos bullicioso.